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Entre las múltiples aplicaciones de la pulverización de agua, destaca su uso por los equipos de emergencia.

Su utilización en el rescate después de un terremoto o un derrumbamiento permite la rápida precipitación de las partículas en suspensión lo que supone una mejor respirabilidad del ambiente, que puede resultar vital para los supervivientes y también para los equipos de rescate.

Fue utilizado por los equipos de rescate en la Zona Cero de NY  después de los atentados terroristas del 11-S.

La utilización de vapor de agua, en lugar de la utilización de agua en estado líquido tiene además la ventaja de que evita la creación de lodos.

En el caso de la extinción de incendios en edificios, la gran ventaja es que se consigue reducir la temperatura y humidificar el ambiente sin inundar la estructura, que en muchos casos queda gravemente afectada después de la misma.

Además, su efecto refrescante puede resultar muy beneficioso para la rápida hidratación de los componentes de los equipos de rescate.

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Con la pulverización de agua en las zonas de trabajo de las empresas cementeras, se consigue reducir sustancialmente la presencia de partículas en suspensión, consiguiéndose una mayor calidad de aire, evitando la propagación de partículas que perjudican a la maquinaria, a los vecinos y la salud de los trabajadores.

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En las operaciones de carga y descarga de productos a granel, se produce una dispersión del producto como consecuencia de la suspensión de partículas.

Con la aplicación del sistema de vaporización de agua se consigue que las partículas se precipiten más rápidamente, evitando así mermas del producto y una dispersión que contamina la maquinaria y las áreas de carga y descarga.

De ésta forma se evita también la inhalación por parte de los operarios, reduciéndose el riesgo de enfermedades respiratorias.

Las instalaciones Cobertia se adaptan a cada necesidad. Desde instalaciones fijas en lugares estratégicos a equipos móviles que permiten una mayor versatilidad.